25/09/2013

"La Muñeca Fea", Francisco Gabilondo Soler (Cri Cri)

Escondida por los rincones,
temerosa de que alguien la vea,
platicaba con los ratones
la pobre muñeca fea.
Un bracito ya se le rompió,
su carita está llena de hollín
y al sentirse olvidada lloró
lagrimitas de aserrín.
Muñequita,
le dijo el ratón,
ya no llores tontita
no tienes razón.
Tus amigos
no son los del mundo
porque te olvidaron
en este rincón.
Nosotros no somos así.
Te quieren la escoba y el recogedor,
te quieren el plumero y el sacudidor,
te quieren la araña y el viejo veliz
también yo te quiero
y te quiero feliz.
Muñequita,
le dijo el ratón,
ya no llores tontita
no tienes razón.
Tus amigos
no son los del mundo
porque te olvidaron
en este rincón.
Nosotros no somos así.
Te quieren la escoba y el recogedor,
te quieren el plumero y el sacudidor,
te quieren la araña y el viejo veliz,
también yo te quiero
y te quiero feliz.
Biografía de Cri Cri: http://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_Gabilondo_Soler

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18/09/2013

Caperucita en Rima, de Guillermo Saavedra

Caperucita en Rima, de Guillermo Saavedra, en su libro Cenicienta no escarmienta y otros cuentos con pimienta. 

CAPERUZA COCINERA

Ya es grande, Caperucita,
se convirtió en Caperuza;
vive en Santa Teresita
y es maestra de lechuzas;

les enseña a abrir los ojos
bien grandes toda la noche
para ver como los piojos
salen a pasear en coche.

Se casó con un cartero
que conoció en Chacabuco,
donde fue a comprar ruleros
y a jugar torneos de truco.

Cuando llega el carnaval,
disfrazada de lenteja,
inaugura un festival
que organizan las almejas.

Es feliz, ya no se acuerda
de ese día tan terrible
cuando, por ser medio lerda,
se la comió un lobo horrible.

Sin embargo, algunas veces,
cuando está muy aburrida,
el lobo se le aparece
y ella le hace la comida.

Guillermo Saavedra

                                                               Escritor, argentino, 1960


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15/09/2013

Reconocimiento a Dante León Morales por parte de Marta Mercado

Domingo, 15 de septiembre de 201301:00

Un docente increíble

En este septiembre de 2013 de un siglo XXI, las comunidades educativas y la ciudad de Cañada de Gómez celebramos la distinción del Ministerio de Educación de Santa Fe en su proyecto “El camino de la Educación Santanfesina” al profesor Dante León Morales


En este septiembre de 2013 de un siglo XXI, las comunidades educativas y la ciudad de Cañada de Gómez celebramos la distinción del Ministerio de Educación de Santa Fe en su proyecto “El camino de la Educación Santanfesina” al profesor Dante León Morales. Nadie puede olvidar el protagonismo educativo que tuvo el profesor cuando en el año 1963 llega a la Escuela Normal N° 7 “Juan F. Seguí”. Venía del norte santafesino y se encontró en su nuevo lugar valorados de una educación relevante y participativa. Impactó con su agenda acorde a los nuevos tiempos. Profesor de Filosofía y Pedagogía sus clases se transformaron en horas de conocimientos relevantes con estrategias que movilizaban a la lectura y discusiones significativas. Gestionó con una indiscutida participación profesional escala de valores y proyectos educativos que la ciudad pudo reconocer como grandes desafíos para lograr transformaciones sociales. Todos debían estudiar y lograr un título pues les permitiría una movilidad social y un trabajo para su futuro. La inclusión de los niños y adolescentes lo funcionalizó con asistencia de las cooperadoras escolares, privados, Rotary Club y del Instituto Becario Provincial. Nadie debía abandonar la escuela y todos asistir a las actividades que la misma organizaba; así, se daba una verdadera inclusión educativa. Las visitas domiciliarias eran su herramienta para que el niño o adolescente no abandonara la escuela y lo logró ampliamente. Sus reuniones de personal eran cursos o seminarios de capacitación docente donde la lectura de un libro de temas de pedagogía, psicología o ciencias de la educación maravillaban al personal por sus análisis y reflexiones que no olvidaremos. La Biblioteca Popular “Pablo A. Pizzurno” fue su aliada en la preparación profesional de su personal y su lugar preferido para que se valore la lectura en su dimensión y en la formación de estudiantes como sujetos críticos. Organizó los campamentos educativos del nivel primario y secundario donde todos se comprometían y participaban. Los niños y los adolescentes hoy grandes ciudadanos no olvidan los lugares visitados y la educación integral recibida acompañada por sus docentes. Un utópico proyecto educativo como hacedor transformó la región. La creación del Instituto Superior del Profesorado N° 5 “Perito Francisco Moreno” jerarquizó la ciudad. Todos pudimos estudiar a partir de diferentes carreras terciarias en 1964 con excelencia educativa hasta hoy. Sus paradigmas de trabajo diario y las valorizaciones a los alumnos con problemas diseñando acompañamientos especiales todavía impactan. Las actividades instrumentadas con sus políticas educativas institucionales son reconocidas por su ex personal docente-no docente, ex cooperadores, ex alumnos y actuales docentes que recibieron sus mensajes y los funcionalizan en su andar diario. Gracias por enseñar a ver la docencia como un trabajo en equipo, interinstitucional, apasionante, necesario y desafiante.
 
Marta S. Mercado de Beltramo - LC 5.280.467 - Cañada de Gómez

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PROGRAMA DE FORMACIÓN DE USUARIOS EN EL USO DE LAS HERRAMIENTAS DE BÚSQUEDAS EN INTERNET

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11/09/2013

Romancillo del Niño que todo lo quería ser

El niño quiso ser pez;
metió los pies en el río.. . .
estaba tan frío el río,
que ya no quiso ser pez.
 
El niño quiso ser pájaro;
se asomó al balcón del aire,
. . . estaba tan alto el aire,
que ya no quiso ser pájaro.
 
El niño quiso ser perro;
se puso a ladrar a un gato,
. . . lo trato tan mal el gato,
que ya no quiso ser perro.
 
El niño quiso ser hombre;
empezó a ponerse años,
. . . le estaban tan mal los años,
que ya no quiso ser hombre. 
 
Y ya no quiso crecer;
no quería crecer el niño,
se estaba tan bien de niño
. . .pero tuvo que crecer. 
 
Y una tarde, al volver
a su placita de niño,
el hombre quiso ser el niño
. . .pero ya no pudo ser.
 
Fray Camilo Montes Vega, O.S.A.
Religioso Agustino, De La Provincia Agustiniana de San Nicolás de Tolentino, Michoacán. 
Nació en Bernal, Qro. El 23 de septiembre de 1934 y murió el 13 de junio de 1989. En Queretaro, Qro.


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07/09/2013

El poeta bogotano John Fitzgerald Torres S. ganó el Premio de Literatura Infantil y Juvenil.

Premian historia de niño que odiaba leer
Premian historia de niño que odiaba leer
John Fitzgerald Torres (1964), con la escultura que hace parte del premio.
Foto: Diego Santacruz / EL TIEMPO

El poeta bogotano John Fitzgerald Torres S. ganó el Premio de Literatura Infantil y Juvenil.

El drama de un niño que se niega a leer un libro que le mandan para la semana de receso de su colegio conforma la trama central de la novela 'Por favor, ¡no leas este libro!', que fue galardonada esta semana con el VI Premio de Literatura Infantil y Juvenil Barco de Vapor-Biblioteca Luis Ángel Arango, que entregan la Fundación SM y el Banco de la República.
Su autor, quien se presentó al concurso con el seudónimo de ‘Lui Lui’, es el poeta bogotano John Fitzgerald Torres Sanmiguel, quien recibe este premio, el más importante que se entrega en este momento en el país en la categoría infantil y juvenil, como un “espaldarazo” a su verdadero debut en este género.
“Uno comienza en esta aventura sin esperar este tipo de reconocimientos, sino construyendo la historia que uno sueña; pero, claro que este es un aliento para continuar y es la confirmación de que esa motivación, de hace algunos años, de querer hablar a los niños y a mis hijos no estaba equivocada y significa entrar en un territorio que están por explorar”, anota el autor, quien en sus inicios como escritor, hace más de 20 años, realizó algunos ejercicios narrativos en este género.
El libro de Torres, que competía con otros 11 finalistas, resultó escogido por el jurado, conformado por Consuelo Gaitán, directora de la Biblioteca Nacional; Federico Díaz-Granados, poeta; Julio Paredes, escritor y editor; Sergio Andricaín, escritor cubano y crítico de literatura infantil, y Carlos Sánchez Lozano, editor, lingüista y literato en representación de Ediciones SM.
Torres recibió una escultura que identifica el galardón, 10.000 dólares (unos 19 millones de pesos) y la publicación de su libro, que se lanzará durante la Feria Internacional del Libro de Bogotá del próximo año.
El autor anota que el título de la obra ganadora, 'Por favor, ¡no leas esta libro!', juega con esa idea que tanta inquietud despierta en el temperamento rebelde de los niños al llevarles la contraria.
A propósito de la desidia por la lectura que caracteriza al protagonista de su novela, el autor acepta que los niños de hoy están expuestos en su vida cotidiana a unas perspectivas novedosas.
“Por una parte, creo que nuestros niños están expuestos a muchísimos estímulos para que la lectura les sea grata y una actividad natural. Las editoriales, los promotores de lectura, las bibliotecas, los autores están enfilando baterías para entregar un acervo literario cuidadoso y estético, que es algo afortunado. Sin embargo, de otra parte, también están más expuestos a una serie de estímulos distractores, que pueden ser sumamente riesgosos, como el mal uso de la tecnología, de la información errada que se mueve en la web”, dice Torres, y agrega que esto supone un reto para los autores que quieren apostarle a este género.
Entre poesía y docencia
Torres estudió Agronomía en la U. Nacional y Literatura y Lingüística en la U. Distrital. Es magíster en Literatura de la U. Javeriana. Es el fundador y director del Festival Internacional de Poesía de Bogotá. Ha sido docente y conferencista invitado en universidades como State University of New York (EE. UU.).
CARLOS RESTREPO
Cultura y Entretenimiento


http://m.eltiempo.com/entretenimiento/libros/premian-historia-de-nino-que-odiaba-leer/13050640/1/home


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El anillo encantado, Colección Pan Flauta, Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1993


                         El anillo encantado  
                        María Teresa Andruetto

Ifigenia tenía el cabello rubio como el trigo y unos ojos más azules que
el lago de Constanza.
Caminaba descalza a la orilla del agua.
Era pálida y leve.
Parecía hecha de aire.
El emperador Carlomagno la vio y se enamoró de ella.
Él era ya un hombre viejo y ella, apenas una muchacha. Pero el Emperador
se enamoró perdidamente y olvidó pronto sus deberes de soberano.
Los nobles de la corte estaban muy preocupados porque nada interesaba
ya a Carlomagno.
Ni dinero.
Ni caza.
Ni guerra.
Ni batallas.
Sólo la muchacha. 
A pesar del amor, Ifigenia murió una tarde de abril llena de pájaros.
Los nobles de la corte respiraron aliviados.
Por fin el Emperador se ocuparía de su hacienda, de su guerra y de
sus batallas.
Pero nada de eso ocurrió, porque el amor de Carlomagno no había
muerto.
Hizo llevar a su habitación el cadáver embalsamado de la muchacha.
No quería separarse de él.
Asustado por esta macabra pasión, el Arzobispo del imperio sospechó
un encantamiento y fue a revisar el cadáver.
Muerta, Ifigenia era tan hermosa como cuando caminaba descalza junto
al lago de Constanza.
La revisó de pies a cabeza.
Bajo la lengua dura y helada, encontró un anillo con una piedra azul.
El azul de aquella piedra le trajo recuerdos del lago y del mar distante.
El Arzobispo sacó el anillo que estaba escondido bajo la lengua.
Ni bien lo tomó en sus manos, Carlomagno enterró el cadáver.
Y se enamoró del Arzobispo.
El Arzobispo, turbado y sin saber qué hacer, entregó el anillo a su
asistente.
Ni bien el asistente lo tomó en sus manos, Carlomagno abandonó al
Arzobispo.
Y se enamoró del asistente.
El asistente, aturdido por esta situación embarazosa, entregó el anillo
al primer hombre que pasaba.
Ni bien el hombre lo tomó en sus manos, Carlomagno abandonó al
asistente.
Y se enamoró del hombre.
El hombre, asustado por este amor extraño, empezó a correr con el
anillo en la mano, y el Emperador tras él.
Hasta que se cruzó una gitana y el hombre le entregó el anillo.
Ni bien la gitana lo tomó en sus manos, Carlomagno dejó de perseguir
al hombre.
Y se enamoró de la gitana.
Pero a la gitana se le cayó el anillo al agua.
Ni bien el agua recibió el anillo en su lecho, Carlomagno abandonó a
la gitana.
Y se enamoró del lago de Constanza junto al que lfigenia caminaba
descalza.








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